EVIDENCIA EL RECONOCIMIENTO POR PARTE DE JESUS MISMO LA INDIVIDUALIDAD, PERSONALIZAD Y VOLUNTAD DEL PADRE..
No puedo yo hacer
nada por mí mismo ἐμαυτοῦ; según oigo, así juzgo, y mi juicio es justo, porque no busco mi voluntad θέλημα, sino la
voluntad θέλημα del Padre, que me envió.
(Joh 5:30)
Jesús les dijo:
-- Mi comida es que haga la voluntad θέλημα del que me envió y que acabe su obra. (Joh 4:34 )
Porque he
descendido del cielo, no para hacer mi voluntad θέλημα, sino la voluntad θέλημα del que me envió. (Joh 6:38)
Y ésta es la
voluntad θέλημα del que me envió, del Padre: Que todo lo que me diere, no pierda de ello,
sino que lo resucite en el día postrero, Y esta es la voluntad θέλημα del que me ha enviado:
que todo aquel que ve al Hijo y cree en él tenga vida eterna; y yo lo
resucitaré en el día final. ( (Joh 6:39,40)
El que quiera
hacer la voluntad θέλημα de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi PROPIA
CUENTA/ MÍ MISMO ἐμαυτοῦ. (Joh 7:17)
JESUS, EL SER DIVINO MANIFESTADO EN CARNE DIJO: 7 El que quiera hacer la
voluntad de Dios, conocerá si la doctrina es de Dios, o si yo hablo por mi
propia cuenta. (Joh 7:17 ) cuando refiere PROPIA CUENTA... claramente se
reconoce la propia voluntad.. Mas dijo que no HABLABA POR CUENTA PROPIA.. Y
TAMBIEN ASEGUNRA Q: Porque yo no he hablado por mi propia cuenta (Joh 12:49) Reconoce
al Padre como alguien real con cuenta propia ἐμαυτοῦ o VOLUNTAD PROPIA
θέλημα..o alguien con la potestad de dirigir el accionar propio..
La frase “…pero no se haga mi voluntad” indica el sometimiento de Su voluntad al Padre, no a la voluntad de sí mismo lo cual sería en este caso a la voluntad de la manifestación o naturaleza humana y eso sería absurdo ya que se trata de un mismo y solo ser manifestado, osea, como humano...
Esto muestra que la
persona/el ser manifestado en carne tenía una voluntad separada y diferente a
la del Padre, debido a que aquí tenemos dos voluntades separadas y simultaneas.
Aplicando tales voluntades separadas y simultaneas al mismo ser refirido, osea Jesús, una a la de la manifestación (su naturaleza humana) y la otra
la del ser que se manifestó en tal, osea la deidad, sería absurdo como vimos anteriormente ya que se trata solo de uno y el mismo ser manifestado.